Me parece tan importante
el Perdón como ausencia del Rencor,
que permite que no estemos amargados, que amplío un aspecto más en el Blog donde ya
comencé a hablar en el primer artículo sobre el Perdón. Éste y el otro salen los dos del
Perdón, amplio artículo que no pongo aquí por ser muy amplio, pero siempre de interés por lo que señalo: El no sentir
Rencor que enturbia la vida y la de nuestros hijos. Así, y aprovechando que
hace pocos días se habló del Perdón en Custodia Compartida y Denuncias Falsas,
continúo yo para el Blog y para Custodia Compartida y Denuncias Falsas. Espero
que sigamos hablando muy largo y tendido (todo lo que haga falta) porque es el concepto,
junto a la realización de Duelo, hay que revisarlos hasta la saciedad;
tanto por nuestra salud mental como por la de nuestros hijos… Imprescindibles
ambas capacidades para seguir adelante (capacidad de perdonar capacidad de hacer los Duelos. Recoger así, los momentos de felicidad
vivenciándola, en la medida de lo posible, pero ni un poquitín menos. Previamente tenemos que tener la Capacidad de
Perdonar… ¡Fijaros si no es importante poder perdonar para continuar en el ir
hacia delante sin el Rencor…!!
La capacidad de perdonar[1]: Leonard Horwitz[2], médico, especialista en Salud Pública
nos introduce en los dos aspectos del perdón:
B.- Lo
Evolutivo. Lo reiterativo a lo largo de la vida de la incidencia del motivo
del resentimiento. Quien haya pasado momentos de heridas, daños u ofensas sin haber podido disolverse quedándose adentro, la defensa ante lo que hay dentro, pone en marcha más patología sobre el rencor.
C.-Todo profesional clínico lo dice, yo lo
corroboro, así pues; el perdón genuino conlleva un trabajo intrapsíquico
importante que precisa de un profesional en materia de Inconsciente para lograr:
1.- La elaboración consciente e inconsciente del enfado
2.- La ubicación de la ofensa en el contexto de una visión integrada
de la persona del ofensor en su totalidad.
Como el
psiquiatra Lillo, pienso que la preocupación por la venganza, ante heridas reales o imaginarias, constituye un
importante impedimento para el desarrollo psíquico. Produce una falta
generalizada de confianza en los otros y un miedo a abrirse a nuevas
experiencias y desafíos, por el temor a la retraumatización[3],
como nombra Horwitz.
El no perdón,
al igual que el duelo patológico (con el que se relaciona estrechamente) inhibe
la libertad para usar la propia creatividad y para obtener placer de la
conducta libre y espontánea. Esto es lo
que agrava la incapacidad de perdonar.
El perdón auténtico debe conllevar
1.-La
aceptación de la profundidad de los propios sentimientos, proporcional a la medida de la ofensa, pero no proporcional a
la de la reparación.
2.-Media siempre en el duelo, el no ser perfectos y nunca
tienen la misma proporción. Desde ahí es más difícil el perdonarse que el
perdonar.
El perdón:
1.- Desde Hanna Ardent y Paul
Ricoerur podemos pensar en la extensión del perdón. Ambos nos dicen que no es
perdonar el hecho en si sino a la persona.
Ésta, la persona, es más que los hechos realizados.
2.-
Perdonar no es volver a tener el mismo vínculo sino aceptar lo sucedido desde
La Comprensión.
3.-
Quiero traer a colación lo dicho por el psiquiatra Lillo algo
fundamentalmente real, “para perdonar
se necesita salud y sin salud mental es más complicado perdonar.”
Sabemos sobre el perdón, que:
·
No requiere que la otra persona ofrezca una
disculpa
·
No significa que la persona agraviada retome una
relación, aunque ya no haya resentimiento.
·
Perdonar no es olvidar; aun cuando se haya
aceptado la ofensa. Pueden decidir mantener la distancia con los ofensores o
tener probabilidades de continuar.
·
Dice Gartner (1991),
que perdonar consiste en desarrollar una visión más realista e integrada del
otro viéndole en su totalidad. Esto es fundamental.
·
Perdonar es abandonar la rumiación
obsesiva en torno a la conducta perjudicial en el ofendido
·
Abandonar el deseo de cierta forma de
retribución de que le devuelva algo propio
Me gustaría explicar lo que sucede con el
perdón de forma cotidiana: Al desaparecer las fantasías
de venganza y retaliación (que se vuelva contra uno la agresión, ser castigado por su deseo de venganza) o la
esperanza de una disculpa, comienzan a desvanecerse en la conciencia el
resentimiento como resultado de la elaboración interna de la ofensa (pensar,
hablar y pasar a otro pensamiento que se denomina elaborar). La herida o el
trauma pueden dejar de ser el tema central en los pensamientos de la persona, aunque
no se hayan olvidado. La persona que perdona llega a ubicar lo sucedido dentro
del contexto, de la relación total del que ofendió y se desintoxica así la
herida, daño o agravio.
Con este
proceso creo que queda claro que perdonar es:
A) Una
capacidad de la persona. La capacidad más importante es 1.- conseguir no echar balones fuera
dejando el pensamiento dividido en dos (en clínica se llama escisión) y 2.-logra Integrar los distintos aspectos de
la persona en el otro y en sí mismo.
A)- Capacidades del Yo: 1.-Ver la realidad.
2.-Controlar los Impulsos (rabia
Ira). 3.-Tolerancia a la ansiedad
(formas para sostener nuestra propia ansiedad)
C) Capacidades
relacionales: en el mundo interno están según tuvimos las primeras
relaciones objetales (de la infancia). Perdonar desde el mundo interno
mantienen las siguientes capacidades: 1.-
Reparar. 2.- Preocuparse por alguien.
3.- Capacidad de estar solo (no es
igual a soledad) 4.- Capacidad de
hacer el Duelo
La capacidad
para comprender cómo las motivaciones y las necesidades influyen en la conducta
y permitir al individuo predecir las reacciones emocionales de los otros.
Contribuye a la capacidad para perdonar. (se denomina Mentalización.)
Los factores
evolutivos tempranos son el lugar donde arraiga y crece la capacidad o la
incapacidad para perdonar (las primeras experiencias). Estructuras
evolutivas primarias que modulan la capacidad del individuo para perdonar.
Posteriormente pueden entrar en juego otras motivaciones, dinámicas y
defensas y contribuir a la dificultad para abandonar el enfado y el deseo
de venganza. Estos factores defensivos secundarios se presentarán de forma
reactivas al no existir la suficiente elaboración.
·
Miedo
a que se repitan daños.
·
La hostilidad continuada implica no abandonar
una relación importante, pero ambivalente. Esto es la frecuencia de la
dificultad para hacer el duelo (Gabbard, 2000).
·
Un Superyo severo por conciencia severa, puede
dar lugar a la represión (ocultación en Incosciente sin saberlo él/ella) de la
hostilidad por las consecuencias negativas.
La expectativa de perfección en
uno mismo (que produce incapacidad para perdonarse) puede dar intolerancia a
cualquier conducta propia Desidealizar esos ideales de perfección en uno y en
los demás; es fundamento para que no se transformen en exigencia y severidad.
Impotencia
abrumadora. una posición de enojo hacia un individuo que nos ha
tratado mal, puede, en la fantasía, obtener un sentimiento de poder para
reemplazar el sentimiento de impotencia creado por el daño narcisista (que aún
no hay relaciones auténticas).
Capacidad para el duelo: llorar una
pérdida psicológica, un daño narcisista, físico o psíquico. El proceso normal
de duelo es la liberación gradual del vínculo de amor con la persona mediante
recuerdos dolorosos y recurrentes de experiencias concretas que crearon ese
vínculo. Estos lazos nunca se deshacen del todo, sino que finalmente se
establece la realidad de tener que abandonar una relación valiosa pero pode
mantener el recuerdo sobre ella. Cuando la hostilidad hacia la persona es
suficientemente intensa, el proceso normal de duelo se interrumpe, y pueden
dominar otros mecanismos:
El duelo y el perdón parecen trabajar
mano a mano Se refuerzan mutuamente. Una incapacidad para perdonar
mantiene vivo el enojo, La incapacidad para perdonar evita que la persona
llegue a aceptar la pérdida de una relación valiosa.
A través del pensamiento ayudábamos al
paciente para lograr que evolucione en su pensamiento y pueda verlo de otra
forma. Me recuerda a P. Ricoeur y la narrativa. El perdón precisa de una
nueva narrativa a través de la reflexión. La metamorfosis se logra en nueva
narrativa unida a otras narrativas de ciertas personas sobre nosotros mismos
que nos den el compendio de mi yo mismo, ahora tras la modificación.
La reflexión es lo primordial para Ricoeur.
Considero como muchos profesionales, que el conseguir la dadivosidad virtuosa
de otorgar el perdón tiene la necesidad de hacer un trabajo laborioso con un
profesional clínico.
Querría introducir dos aspectos que me
parecen importantes, sin duda son dos capacidades:
1.-La capacidad de “Transformar el dolor en
amor.” Del que en mi blog hice
presencia y explicación de cómo se produce
2.-La capacidad de “Sentir Gratitud.” Superar el sentimiento de carencia y sentir
que en lo que le otorgan existe la atención, el aprecio, el reconocimiento
Finalizaría diciendo que cualquiera de las
formas inhumanas con la que el ser humano es tratado, aún así, el resentimiento
y rencor es imperioso que se disuelva en el amor de las victimas para que no
destruya (como a Samsa, personaje de Kafka)[4].
Lo considero imperioso (disolver el
rencor) para salvar, por ser lo más, lo único que tenemos al amparo del
amor, lo más grande que posemos los seres humanos: ¡La Vida!!
Yo no rechazo la religión aunque soy
agnóstica. Busquemos muchos modos para lograr perdonar y cada uno elija el modo
mejor para su Yo Mismo. En lo que estamos todos de acuerdo, es en el riesgo de
destrucción propia si no llegamos al Perdón. Por eso, reincido en lo que dijo
Freud antes de indicar cómo lo veo yo, teniendo como eje principal lo dicho por
Freud y ante la realidad actual además de las Pérdidas, las Separaciones y las
Indefensiones: dijo Freud “Pero al final uno tiene que empezar a amar para
no caer enfermo”.
Según Hannah
Arendt, hay actos que no podemos perdonar. Las acciones que trascienden el
ámbito de los asuntos humanos y las potencialidades del poder humano que
intentan destruirlos (cf., Arendt, 1958: 241). Potencialidades como; la
espontaneidad, la posibilidad de iniciar algo nuevo e imprevisible, la
capacidad de hablar y actuar junto a otros, la pluralidad; elementos
constitutivos de la existencia humana. No podemos perdonar aquellos actos
que pretenden destruir las condiciones fundamentales de nuestra existencia.
Podemos comprender lo imperdonable y,
así, desbrozar el terreno para actuar de nuevo. La comprensión es, la
actividad sin fin que nos permite adaptarnos a la realidad, reconciliarnos con
un mundo en el que nacimos como extranjeros y en el que seguimos siendo
extranjeros, dadas nuestras irreducibles diferencias (cf., Arendt,
1994: 308). Comprender no significa perdonar
lo acontecido sino aceptar su impacto y su incidencia en el mundo común.
“Eventualmente aceptar lo irrevocable y reconciliarse con lo que existe
inevitablemente” (Arendt, 1994: 321s). Comprender
es la capacidad para iluminar un acontecimiento en su
particularidad, sin reducirlo a conceptos generales o a esquemas
conocidos; además, implica el esfuerzo incesante por encontrar sentido en
un mundo atravesado por la imprevisibilidad y la irreversibilidad de la acción.
Al comprender, de cierta forma, podemos comenzar de nuevo, liberarnos de la
cadena de reacciones que nos atan a un evento, ejercer nuestra espontaneidad.
La comprensión puede ser considerada como “la otra cara de la acción” (cf.,
Arendt, 1994: 321s).
·
“El perdón es la llave a la acción y libertad.” Es el lema principal de Hannah Arendt.
Hannah Arendt: fue una filósofa
política alemana y posteriormente estadounidense, de origen judío, y una de las
más influyentes del siglo XX.
Mi artículo
sobre el Perdón que amplia la forma de conseguir y dar el perdón, podéis
lograrlo en Custodia Compartida y Denuncias Falsas y si no fuera posible porque
no pertenecierais a la asociación, poneros en contacto conmigo y os lo mando.
Mejor aún, lo voy a compartir desde CC y DF a mi Face y así está directamente en mi FACE
y como se puede entrar directamente en mi FACE desde el Blog, ya tenéis el
camino abierto quien lo quiera. No lo he puesto en mi blog porque tiene unas
50 páginas y es demasiado amplio, no obstante sí, procuré que fuera lo más claro
posible y lo más extensivo en la explicación. Ciertamente: tanto el Perdón como
La Elaboración de los Duelos son los dos ejes fundamentales para el
sostenimiento del ser humano en autenticidad y Salud Mental y por tanto lo que más importa
para nosotros mismos y para consecuentemente la Educación de nuestros Hijos.
El hombre, genéricamente hablando, tiene dos pilares por donde pasamos todos inevitablemente: por las Pérdidas y por la Indefensión, desde ésta última se llega con facilidad a la ofensa o al daño y nos encontramos con la tesitura de perdonar por nosotros mismos para que no se nos engarce la vida en la amargura, pero para ello hay que tener capacidad y para la capacidad hay que acudir a un profesional propio del aparato psíquico y el Inconsciente, igual que si tuviéramos roto el menisco y tuviéramos que ir al traumatólogo. Cada uno en su materia nos ayudarán a poder seguir caminando en la vida...sin patología física o mental...
Un saludo a todos, Maruxa
El hombre, genéricamente hablando, tiene dos pilares por donde pasamos todos inevitablemente: por las Pérdidas y por la Indefensión, desde ésta última se llega con facilidad a la ofensa o al daño y nos encontramos con la tesitura de perdonar por nosotros mismos para que no se nos engarce la vida en la amargura, pero para ello hay que tener capacidad y para la capacidad hay que acudir a un profesional propio del aparato psíquico y el Inconsciente, igual que si tuviéramos roto el menisco y tuviéramos que ir al traumatólogo. Cada uno en su materia nos ayudarán a poder seguir caminando en la vida...sin patología física o mental...
Un saludo a todos, Maruxa
[1]HORWITZ, Leonar. La capacidad de perdonar:
perspectivas intrapsíquicas y evolutivas. Revista de Psicoanálisis.
Agosto 2006. Nº 23.
[2]HORWWITZ, LEONARD. “The capacity to forgive:
Intraspychic and developmental perspectives"
fue publicado originariamente en Journal of the American
Psychoanalytic Association, vol. 53,
No. 2, p. 485-511.,
2005. Copyright 2005, American Psychoanalytic Association. Traducción: Marta
González Baz
[3] Una recaída en un estado
de trauma, se activa por alguna situación posterior.
[4] Es posible
que leyendo a Samsa, a todos se nos haya ocurrido pensar en la soledad, el
aislamiento, el maltrato, el Estrés Postraumático (Kafka estuvo enfermo y tras
ello escribió la Metarmorfosis). Quizá no se haya comparado el gran y pequeño
libro con el rencor y resentimiento de un hombre muerto por la tiranía y
destrucción de una guerra y por ende el rencor que la impotencia conlleva. Todo
a mí me hace retomar “La Metamorfosis” y asegurar que tras tanta podredumbre y
consustancialmente tantos sentimientos hostiles y venganza ante el opresor y
los asesinos de genocidio, percepción de uno mismo que va aniquilando a quien
sobrevivió y llegó a morir después como Samsa. Yo no he podido menos de
compararlo por primera vez a la consecuencia del rencor y el resentimiento que
mata por dentro logrando sus objetivos (Kafka era judio) de los que llevaron a
cabo los genocidios. Si no sé como se arregla tanto rencor si sé que lo único
que tenemos propio, es la vida y por ella, para no perderla, tenemos que
resolver el sentimiento del rencor no tanto por pertenecer al Narcisismo las
heridas, como porque estamos defendiendo nuestra propia vida del aislamiento
interno, para no acabar como Samsa.
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